La fuerte lluvia que cayó sobre Mérida y sus alrededores vino acompañada de fuertes rachas de viento de hasta 60 kilómetros por hora, como ya de había pronosticado, y éstos tiraron un señalamiento “de bandera” sobre la carretera a Progreso.
La base metálica de esta enorme señal se dobló como si fuera de hule y cayó sobre las vías de ida y de regreso, con tal suerte que ningún vehículo sufrió daños.
Agentes policiacos llegaron y establecieron un operativo para controlar la vialidad, toda vez que los carriles quedaron obstruidos parcialmente por este hecho, y se solicitó apoyo para poder retirar el señalamiento y así poder liberar el tráfico.