Mérida, Yucatán 2 de abril de 2024.- Personal médico contratado por el Gobierno federal en Yucatán desde la pandemia del Covid para prestar sus servicios en varios hospitales y centros de salud del estado exigió a las autoridades federales que les respeten sus derechos labores y les cumplan la promesa que les hicieron de basificarlos luego de trabajar y superar la emergencia sanitaria.
Los 480 trabajadores de la salud en el estado que en 2020 fueron considerados “héroes” por decidir tomar el riesgo de ofrecer atención médica en pleno auge de la pandemia y tomar el lugar del personal de mayor edad y de base que tuvo permiso de irse, hoy son tratados con la punta del pie, marginados, engañados y hasta amenazados.
Lejos de cumplirle la promesa de otorgarles una base, ahora el Gobierno federal les informa que ya no podrá darles un nuevo contrato, porque, aunque les prometieron que tendrían trabajo todo este año, hace unas semanas les comentaron que solo sería por el primer semestre de 2024 y hace un par de días les comunicaron que solo será por el primer trimestre del año, el cual ya finalizó.
El argumento es que no se tienen recursos debido a la desaparición del INSABI y su transformación al Órgano Público Descentralizado (OPD) IMSS Bienestar. Ante ello, un grupo de estos trabajadores se manifestaron para exigir al Gobierno federal que cumpla su promesa.
Una de las trabajadoras, la doctora Mercy Sánchez, en representación de los trabajadores federales, señaló que de la noche a la mañana pasaron a la incertidumbre, pues de tener un empleo, al menos con contrato, hoy se encuentran desempleados y sin que nadie del Gobierno federal les dé una respuesta al esfuerzo que hicieron desde hace 4 años.
Cuando aceptamos hace 4 años era porque tuviéramos una basificación, una certeza laboral para nosotros y nuestras familias. El Gobierno federal que es el que nos prometió la certeza laboral, no tenemos la base y ahora ni el contrato, expresó la mujer, quien presta sus servicios en el área de Urgencias del Hospital General “Agustín O’Horán”.
Acompañada de varios de sus colegas, Mercy Sánchez explicó que después de 4 años ininterrumpidos de contrato y de trabajo arduo, ayer los comenzaron a convocar al Hospital Regional de Alta Especialidad de la Península de Yucatán (HRAEPY) para modificar sus condiciones laborales a través de 2 opciones, cambio a Campeche o Quintana Roo o quedarse sin contrato.
Lo único que estamos pidiendo es que nos aseguren la certeza laborar que nos ofrecieron cuando nos contrataron, solo queremos eso para nosotros y nuestras familias, precisó.